Procrastinar

Normalmente la gente que usa la palabra procrastinar me resulta pretenciosa, en mi caso la puse porque no quise usar "pendejear" en su lugar. Pendejar, o procrastinar según lo pretenciosos que sean, ha sido a lo que me he dedicado los últimos días. Hace varios días que debí terminar un documento al que no le he hecho modificación alguna desde el domingo que lo empecé y eso que supuestamente le he dedicado varias horas a su elaboración.

En este momento tengo todo hecho un desmadre, mi recámara es un buen ejemplo de como tengo todo hecho bolas tanto afuera como adentro. No subo una foto porque me dió flojera sacar la cámara, tomar la foto, pasarla a la compu, ajustarla y subirla al blog. Muchas molestias que se resuelven con pedirles que imaginen una cama sin tender, calzado aventado por aquí, folders con documentos seguriles regados por allá, cajas de cartón de varios tamaños amontonadas frente al escritorio, cajas de archivo muerto llenas de juguetes apiladas junto a la puerta (los juguetes son parte de un negocio que llevo manteniendo desde hace año y medio) y 2 escritorios llenos de cosas que no sé de dónde salieron.

A pesar de saber que tengo que empezar a terminar las cosas pendientes a la brevedad aquí me tienen escribiendo. Me siento como este comic que creo ya había subido hace algún tiempo:

Ojalá fuera así de sencillo.*

Y como mis problemas no se van a ir jamás sino que se seguirán acumulando hasta que revienten creo que lo mejor es ponerme a hacer algo, al menos voy a recoger parte de este tiradero, ya no puedo caminar sin pisar algún papel seguramente carente de importancia. Después tal vez pendejee otro poco antes de ponerme a terminar el archivo que era para el miércoles.

*Fuente: Dilbert.com