viernes, 25 de noviembre de 2011

Cucaracha

En lugar de dormir bien previo a mi primer día de trabajo en mi flamante nuevo empleo me encuentro escribiendo un post sobre cómo han estado de agitados los últimos dos días donde todo se podría resumir a que me he sentido como cucaracha por al menos tres distintas razones.

El peor novio por internet del mundo

La primera de ellas tiene que ver con un paquete que me llegó por correo el miércoles por la mañana. Debido a mi negocio juguetero recibo muchos paquetes de diversas partes del mundo, razón por la que no detecté un paquete cuyo contenido no correspondía al citado negocio. Aunado a eso el cartero se llevó la hoja donde venían los datos del envío ya que a falta de acuse de recibo me hizo firmar en dicha hoja, nada raro hasta ahí. Sorpresa la que me llevé cuando abrí la caja y me encontré con estos muchachos:

¡Los libros oficiales de uno de mis webcomics favoritos!

Resulta que M4 ya me había advertido que me había enviado algo por mi cumpleaños pero como eso fue hace casi un mes asumimos que se había perdido en el correo. Además pensé que sería algo más equis, no un detalle tan específico como éste así que por un momento me sentí una cucaracha por no haberle enviado ese ramo de rosas en su cumpleaños, que es 9 días después del mío, sólo porque me pareció estúpidamente caro pagar 50 dólares por una docena de rosas compradas por internet cuando ella se tomó la molestia de investigar sobre mis gustos y pagar 29 dólares más envío (referencías aquí y acá) para regalarle algo al sujeto que la cortaría unas semanas después. ¿A poco no soy el mejor novio por internet del mundo?

Janus, el quitaempleos

Ese mismo día pero por la tarde recibí la llamada de un amigo de mi primer empleo a quien ayudé temporalmente a planear y agendar unas entrevistas para una de las cuentas que tiene en su empresa de marketing web. Me pidió ayuda porque supuestamente iban atrasadísimos en el proyecto y nadie tenía el tiempo para hacer eso bien por lo que pensó que una buena forma de aprovechar mis últimos días de holgazán sería dedicarme a hacer llamadas por teléfono como tanto me gusta. Accedí nomás por ayudar a un amigo en desgracia.

La llamada fue corta. Mi amigo tenía un tono de molestia. El diálogo fue el siguiente:

G: ¿Que agendaste 7 citas ayer?
Janus: Sí, ¿hice mal?
G: No wey, lo que pasa es que F. decía que sólo podía agendar 3 citas a la semana y estamos atrasadísimos. Ya la corrí.
Janus: A ver, aguanta. No tomes decisiones enojado... *siente culpa*
G: Es que para qué eres tan pinche eficiente. Tu agendaste 7 citas en un ratito y ella en 2 meses no hizo ni la mitad del proyecto. Además me tiene descuidadas otras cuatro cuentas todo por irse a la escuela... bla bla bla. Ven mañana para que me expliques qué fue lo que te dijo y veamos quien lo va a hacer.

No fue mi culpa que corrieran a F. (para los que no la recuerden F. aparece en este post como F2) pero si fui quien hizo que se derramara el vaso. Aunque no debí sentirme mal por eso me fue inevitable pensar que si me hubiera negado a ayudarlos ella todavía tendría trabajo por muy inútil que fuera. Para mi tranquilidad la culpa me duró 5 minutos.

¡Que pase el desgraciado!

La tercer razón por la que me sentí cucaracha tiene que ver con mi familia. Este tema me va a dar mucho de que hablar próximamente por lo que no quiero tocarlo muy a fondo pero es un asunto que tiene todos los elementos para aparecer en un programa de Laura en América: resulta que descubrimos que tengo, al menos, una media hermana, lo que implica que mi papá tiene otra familia. Eso explica muchas cosas, empezando por aspectos económicos y por qué a pesar de que mi papá nunca gastaba dinero en la casa (le pagaron las colegiaturas hasta la prepa y no teníamos un estilo de vida muy costoso) nunca le sobraba dinero. Mi gran coraje no es por el hecho de que tenga otra familia sino que el muy cabrón nos ha hecho pasar por muchos problemas económicos los últimos años donde mi madre y yo hemos tenido que sacar adelante deudas y demás para que ahora resulte que terminamos pagando gastos de otra casa, faltaba más...  

Creo que lo mejor es que me vaya a dormir, mañana debo llegar temprano para causar la impresión de ser alguien eficiente y comprometido con el trabajo. Debo retrasar lo más que se pueda el que se den cuenta del sujeto dañado que soy.

7 comentarios:

I'm Violet Veela dijo...

A veces sólo se puede decir: cha-le. El karma se las arregla para hacer justicia (sólo con nosotros)

Manuel José dijo...

Nada de esto sucedería si estuvieras en Paraguay...

Unknown dijo...

:O
Diosantodemivida...

Ele y Juan Pa
http://sailing-nena.blogspot.com/

Deephardy dijo...

1. No importa lo que haya pasado, llámala y agradécele.
2. No sé que decir, yo también hice que despidieran a alguien. El tipo era un grandísimo pendejo, pero igual me dio remordimiento.
3.No deberías sentirte como cucaracha por eso; tu papá sí.

la mis dijo...

válgame, me ausento unos cuántos días y mira lo que pasa; pero nada es lo suficientemente fuerte para que te sientas cucaracha, eso déjaselo a la bola de pendejos esos de los que hablas.

Ek dijo...

Ash, los hombres! ¬¬

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo con Deephardy...En todo!